El frío que hacia a las 8 de la mañana era considerable, 2ºC marcaba el coche, pero ni rastro de nubes. Una vez montadas las cañas, con flotadores de 0,5 y 4*14, medida la profundidad (menos de 1m), y tras hacer un poco de ejercicio copela para delante copela para atrás,nos dispusimos a empezar la pesca. Lo primero en picar fue una percasol, y tras unas cuantas me picó una bagra, con lo que me decidí a cambiar a maíz, con lo que tras una espera conseguí la segunda picada.
Una primera picada de carpa se me escapa. Viendo el tamaño de la picada, me decido a cambiar de un 0,12 a un 0,14, pero los peces parecen no querer ese grosor y la percasol pica mucho más espaciada. Monto una metralleta de 2 metros y me dispongo a tentar a los pequeños pececillos a los pies. Picadas seguidas, pero tras 6 percasoles la cosa se para. Vuelvo a la enchufable, pero el pescado tampoco responde. Y esa es la tónica general de todos los que estábamos pescando, no hay manera de que piquen.
Ya finalizando la jornada tengo nuevamente una picada de carpa, que empieza a tirar hasta que parte el 0,14, a saber que bichos hay sueltos por ahí...
Final del concurso y nadie ha conseguido sacar ninguna carpa, de hecho el único que las ha tenido al menos al otro lado de la linea he sido yo, pero no he sabido aprovechar la circunstancia. Hago un 1 con casi 0,520gr con unas 50 percasoles y 3 bagras. Y así llegamos nuevamente al final de la temporada.
Quizás un día de estos me desplace al Llobregat, pero con la lluvia que está cayendo estos días, a saber cuando será... En fin, ¡Saludos!